Cuando el frio aprieta, encuentra absolutamente cualquier reducto para meterse en el hogar, obligando a que utilicemos la calefacción más de lo que nos gustaría, ¡sobre todo con los precios de ahora!
Por eso, es necesario pensar en todo tipo de formas para que el aislamiento sea el más adecuado. En este sentido, buena parte del aislamiento térmico de una casa pasa por las ventanas, es ahí por donde se escapa el calor.
No es casualidad que, en las casas con más años una de las reformas más pertinentes para lograr una casa más eficiente sea el cambio de ventanas. En este caso, las nuevas ventanas proporcionan, gracias al doble cristal el mejor aislamiento, junto con una instalación que incluye el adecuado sellado de todas las juntas.
Métodos para conseguir aislar las Ventanas
Además de todo ello, existen otras formas para conseguir el mejor aislamiento, independientemente de si hablamos de ventanas nuevas o de ventanas viejas. Algunos remedios caseros que nos puede ser de gran utilidad y que no contemplan el cambio de ventanas.
Aislamiento de la Caja de la Persiana
Uno de los mayores puntos de fuga de calor se produce a partir de la caja de la persona. Así, la zona superior de la ventana es el lugar donde mayor corriente de aire frío puede llegar a entrar. El remedio para paliarlo es bien sencillo: aislar la caja.
Así, es necesario abrir la tapa habiendo bajado la persiana, limpiarlo previamente y luego colocar un aislante a la medida del interior de la caja. En el mercado existen aislantes especiales precisamente paralas cajas de persiana.
Colocación de Burletes
El aislamiento de las ventanas también depende de si hay corrientes de aire en los márgenes del marco de la ventana, sobre todo cuando hablamos de ventanas metálicas que ya son algo viejas. La solución ante esto es también bastante sencilla y económica.
Nos referimos a colocar burletes de caucho, por medio de un autoadhesivo, en los marcos de las ventanas. Para ello, primero limpia bien la zona, con las ventanas abiertas y asegúrate de que la zona está seca para que, al colocar con cuidado el burlete, quede perfectamente alineado y sin relieve. Así se fijará perfectamente al cerrarse.
Persianas y correcto uso de las mismas
La persiana es un elemento que nos puede ayudar notablemente a aislar el frío. Ahora bien, hay que tener en cuenta una serie de consideraciones. En primer lugar, la calidad de las persianas. Unas persianas que ya están viejas y deterioradas aislarán peor. Si sucediera esto, el mejor consejo es cambiar las persianas. A diferencia de las ventanas completas, las persianas no son demasiado caras y las puede instalar cualquier persona con un poco de “maña”.
Otro aspecto a tener en cuenta es su uso para optimizar su poder aislante. Se recomienda bajar las persianas cuando las temperaturas vayan a ser más frías. Es decir, justo cuando anochezca. De esta forma, se guardará el calor durante más tiempo.
Las cortinas
Aunque pueda parecer una nimiedad, una cortina puede ejercer como perfecto aislante de ventanas. No en vano, hablamos de otro obstáculo más para que el calor no se escape por la ventana. En este sentido, hay algunas cortinas que son muy específicas gracias a su poder aislante.
Por un lado, podemos encontrar las cortinas térmicas. Efectivamente, son cortinas más gruesas y opacas. Por el otro, las cortinas dobles sirven para dejar entrar luz durante el día, mientras que por la noche son dos telas que sirven para impedir que salga el calor.
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Ya ves que hablamos de consejos sencillos y que te pueden ser de gran utilidad. Conseguirás un hogar mucho más confortable y, a la vez, gastarás menos en calefacción.
